Título: Tu cuerpo es tuyo
Publicación: Octubre 2021
Autor: Lucía Serrano
Editorial: NubeOcho
Formato: Tapa dura, 40 páginas
ISBN: 978-8418599408
Tu cuerpo es tuyo, Lucía Serrano
Tu cuerpo es tuyo me tiene fascinada y estoy segura de que a ti te va a pasar lo mismo en cuanto lo tengas.
Este álbum ilustrado de Lucía Serrano, publicado por NubeOcho, va ya por su tercera edición, y espero desde aquí darle impulso para que sean muchas más porque me parece un libro verdaderamente fantástico: una temática muy necesaria, explicada de una forma clarísima y al mismo tiempo muy certera, lo que permite que se pueda leer y abordar desde muy peques, sentando las bases del respeto a uno mismo y los límites personales, que son tan importantes.
El objetivo de Tu Cuerpo es Tuyo es el autoconocimiento, en el sentido más amplio del término. Poder hablar de cómo es nuestro cuerpo, qué partes tiene, cuáles son sus nombres, sin miedo ni vergüenza. Y aprender que nuestro cuerpo es algo sagrado y tenemos autonomía sobre él por muy pequeños que seamos.
La lectura comienza precisamente con esa afirmación: «Cada persona tiene un cuerpo. Solo uno. (…) Tu cuerpo es tuyo«.
Nuestro cuerpo tiene muchas partes y podemos hablar de todas ellas con total normalidad.
Sí, también podemos hablar de nuestras partes privadas. Podemos verlas, podemos llamarlas por su nombre y, es más, debemos hacer todo esto para que sepamos que nadie debe tocarnos sin permiso.
Me parece especialmente bien enfocado el tema del consentimiento porque deja claro que podemos negarnos a que nos toquen. No solo las partes privadas, podemos negarnos a dar o recibir una abrazo o un beso, incluso si se trata de una persona mayor.
Cuando alguien te dice que no le hagas una cosa, tienes que hacerle caso. Igual que cuando lo dices t´ú.
¿Hay excepciones a esto? Puede haberlas. Por ejemplo, si vamos a cruzar la calle un adulto puede coger al niño del brazo sin avisarle para así evitar un accidente, eso está bien porque le está protegiendo. También un médico puede revisar al peque para asegurarse de que está sano o curar una enfermedad, algo que debería hacer con un adulto siempre presente. La clave es que siempre serán acciones destinadas a ayudar, proteger y cuidar, y explicando por qué se tiene que hacer así.
Me ha costado seleccionar unas pocas imágenes del libro porque verdaderamente es una joya y hace un recorrido muy completo por todas las circunstancias que se pueden dar.
El libro explica qué hacer si nos sentimos incómodos o si se ha llegado a producir una circunstancia que nos preocupa. Comparto el enfoque de que en nuestros pensamientos pueden surgir ideas que nos atormenten y no nos atrevamos a compartir, y precisamente por ser secretos que hacen sentir mal, el niño debe buscar a un adulto de confianza para contárselo, e insistir incluso si el primero al que se lo cuenten no les ha mucho caso o no valoran lo suficiente lo sucedido.
Creo que lo que hace a este álbum ilustrado tan verdaderamente especial es que sabe plasmar un tema muy delicado con una sencillez increíble. Y por este motivo es una lectura que se puede hacer desde muy pequeños, abordando así un tema que debería ser algo natural pero que por desgracia no siempre lo es, siendo una enseñanza de vida muy importante.
Nosotros en casa lo hemos leído con nuestra Tercera, que tiene ahora 3 años largos, y no solo le ha gustado mucho sino que vemos que ha entendido el concepto sin ningún problema. Algunas cosas ya las sabía – o las intuía – pero otras le han quedado más claras y ese «tu cuerpo es tuyo» ahora se ya un lema que ha adoptado como propio.
Nunca es demasiado pronto para hablar del cuerpo, de nuestra intimidad y de cómo protegernos frente a un abuso sexual y este libro es buena prueba de que se puede hablar de este tema desde bien pequeños. Fantástico es decir poco.
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