Cinco minutos de paz (portada)

Título: Cinco minutos de paz
Publicación: Septiembre 2016
Autor: Jill Murphy
Editorial: Kalandraka
Formato: Tapa dura, 32 páginas
ISBN: 978-8484642404

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Cinco minutos de paz, de Jill Murphy

Cinco minutos de paz, de Jill Murphy es un bonito libro infantil de Kalandraka que ha recuperado ahora la editorial coincidiendo con el 30 aniversario de su publicación. Un álbum ilustrado con el que sin duda muchos papás y mamás se van a sentir identificados porque ¿cuántos días nos desesperamos por no tener cinco minutos de paz?

Pues eso mismo le pasa a Mamá Grande. Ella quiere cinco minutos de paz y tranquilidad en su bañera caliente, espumosa y burbujeante. Pero sus pequeños tres hijos no se lo van a poner nada fácil. ¿Os suena?

Los niños estaban desayunando y aquello no era un espectáculo agradable. 

Cinco minutos de paz (interior)

Por eso Mamá Grande decidió coger una bandeja del armario y puso en ella una tetera, una jarreta con leche, su taza favorita, un plato de tostadas con mermelada y un pastelero que había sobrado del día anterior. Metió el periódico en el bolsillo y se fue hacia la puerta. 

Pero, como os podéis imaginar, no llegó muy lejos.

Enseguida los niños le preguntaron acerca de dónde iba con aquella bandeja. Y se ofrecieron a acompañarla. Pero Mamá Grande les pidió que se quedaran abajo jugando.

Mamá Grande llenó la bañera de agua calentita. Vació medio bote de espuma de baño en el agua, se puso el gorro y se metió dentro. Se sirvió una taza de té y se tumbó con los ojos cerrados. Era el paraíso.

Cinco minutos de paz (interior_1)

¿Cuánto creéis que duró la paz? Efectivamente, no llegó a cinco mutis.

Enseguida apareció Lester, para tocarle una canción con su flauta. Luego entró Laura, para leer con ella una página de su libro de lecturas. Y, por supuesto, finalmente entró el pequeñín de la familia, con un montón de juguetes.

Al final todos se metieron en la bañera. El más pequeño tenía tanta prisa que olvidó quitarse el pijama.

Cinco minutos de paz (interior_2)

Entonces Mamá Grande salió de la bañera, se secó, se puso la bata y se dirigió a la cocina.

¿Cuánto le duró la soledad? Exactamente tres minutos y cuadrante y cinco segundos de paz antes de que todos volvieran junto a ella.

Nos ha encantado Cinco minutos de paz. Una lectura con la que no sólo se van a sentir identificados muchos padres sino también muchos niños. Nuestros hijos (7 recién cumplidos y 4 años respectivamente) empiezan a ser ya conscientes de la demanda tan alta que tienen de nosotros, especialmente de mamá. Es más, a veces nos conceden cinco minutos de paz, o cinco minutos de telediarios, o cinco minutos de silencio (esto con más dificultad, todo hay que decirlo).

Nos parece un álbum muy bonito para que los padres se sinceren con los hijos, abordando el tema de las propias necesidades desde una óptica muy respetuosa. Mamá Grande es tremendamente paciente y calmada, a pesar de que en ese momento necesita imperiosamente esos cinco minutos de paz.

Nos parece un gran ejemplo de cómo unos padres pueden exponer a sus hijos sus propias necesidades sin que se acabe el mundo y, por supuesto, sin perder los papeles. No es necesario que los padres seamos siempre unos seres perfectos e incansables, es más, una parte importante de la educación emocional pasa por reconocer los límites de nuestras capacidades y también, por qué no, admitir cuando estamos cansados, tristes, saturados o desanimados y necesitamos un poco de apoyo y comprensión.

Una lectura muy recomendable con unas ilustraciones muy dulces, tan actual hoy como cuando se publicó en 1986.

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