El Monstruo de Colores

Título: El Monstruo de Colores
Publicación: Octubre 2012
Autor: Anna Llenas
Editorial:  Editorial Flamboyant
Formato: Tapa dura, 40 páginas
ISBN: 978-8493987749

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El Monstruo de Colores, de Anna Llenas

El Monstruo de Colores, de Anna Llenas es un libro infantil imprescindible en nuestra «biblioteca de sentimientos«.

Un álbum ilustrado súper ventas, presente en miles de hogares, aulas y ludotecas. Fue publicado a finales de 2012 pero creo que ya podemos decir que es todo un referente y una obra que no nos puede faltar si tenemos hijos.

El entrañable monstruo protagonista se ha levantado raro, confuso, aturdido… No sabe muy bien qué le pasa. Se ha hecho un lío con las emociones y, claro, todas juntas, revueltas, no pueden funcionar.

El Monstruo de Colores (interior)

Por suerte, su amiga le ayudará a identificarlas, describirlas y asociarlas con un color, para poder ordenarlas posteriormente en botecitos.

En la fotografía inferior podéis ver la alegría, representada por el color amarillo.

El Monstruo de Colores (alegría)

La última de las emociones, de color rosa, quedará en el aire, para que sean los pequeños lectores los que averigüen con qué sentimiento se corresponde.

 

Nuestra valoración de El Monstruo de Colores

Sin duda alguna, El Monstruo de Colores puede ser una herramienta muy útil para que los padres podamos trabajar la inteligencia emocional de nuestros hijos. Ayudarles a expresar sus sentimientos sin miedo, a identificar qué se siente con cada uno de ellos, cómo nos hacen sentir. Ayudarles a poner orden en la confusión que a veces pueden tener y que en ocasiones da lugar a lo que llamamos «rabietas«, dando validez a sus sentimientos, mostrándoles que nos interesa y haciéndoles ver que la mejor manera de gestionar sus emociones es entenderlas, conocer cuál es su origen y cómo nos transforman.

No es extrañar que esta obra se trabaje en numerosas escuelas infantiles, consultas de psicología infantil y otros centros donde se trabaja con niños. El enfoque que ha dado Anna Llenas a un tema tan complejo como éste es simplemente fantástico y así lo han entendido muchos profesionales enfocados en la infancia.

A la misma altura están sus ilustraciones, que literalmente parece que van a salirse del papel. De hecho, a veces es imposible resistirse a tocar la hoja porque parece que estemos ante personajes tridimensionales. Les ha pasado a todos mis hijos, incluso la pequeñita, que con fascinación ha heredado el libro a sus dos años, siempre pasa su pequeña mano por encima de los personajes porque parecen verdaderamente reales.

Cada página es una obra de arte que dan ganas de enmarcar, ¿alguna vez venderán láminas? Seguro que muchos las compraríamos.

 

El Monstruo de Colores versión pop up (tristeza)

Este álbum ilustrado es excepcional porque enamora por la vista, enternece por su texto, ayuda a desarrollar la inteligencia emocional y es capaz de conquistar a niños y mayores. Lo tiene todo y por eso creemos que es una obra eterna, que seguirá teniendo vigencia dentro de varias décadas.

 

Versiones de El Monstruo de Colores

Además de la versión que todos conocemos de este álbum ilustrado, existe un cuaderno para colorear y una versión pop up de El Monstruo de Colores realmente espectacular, tal como podéis ver en la imagen superior.

 

En 2020 Flamboyant lanzó una versión Kamishibai de El Monstruo de Colores realmente maravillosa, si haces click en el enlace podrás leer nuestra reseña.

 

Para los más peques está disponible en una versión de cartoné, más pequeño y «duro», perfecto para las manitas de los más bebés y una publicación novedosa: El Monstruo de Colores va al cole.

 

Está disponible, entre otros, en catalán e inglés.

 

Material didáctico para trabajar con El Monstruo de Colores

En la web de Anna Llenas la autora ofrece material gratuito para trabajar a partir de El Monstruo de Colores. En concreto, se propone utilizar botes para identificar las emociones y utilizar plantillas para pintar al monstruo del color que corresponda con la emoción que creamos que está sintiendo.

Os animamos a que los utilicéis en casa, son actividades fáciles de realizar, que divierten a los niños y al mismo tiempo estaremos mimando una parte de su desarrollo que no siempre se trabaja en otros ámbitos, donde tradicionalmente se nos ha invitado siempre a reprimir los sentimientos, especialmente si son niños varones.

 

Merchandising

El fenómeno de El Monstruo de Colores ha sido espectacular y no ha dejado de crecer con el paso de los años.

Así, poco a poco ha ido lanzándose una serie de productos relacionados con la obra, increíblemente bonitos y tan cuidado como el libro en sí, demostrando que Anna Llenas entiende a sus lectores.

Por ejemplo, la colección de peluches de El Monstruo de Colores.

O la colección de figuras de El Monstruo de Colores.

Y camisetas, mochilas, estuches, tazas, bañadores… ¡Es que hay merchandising de todo tipo y para todos los gustos!

 

Edad recomendada para leer El Monstruo de Colores

El Monstruo de Colores es una obra muy visual y con poquito texto aunque tiene un contenido bastante profundo. Creemos que se puede empezar a entender su mensaje a partir de los 3 años y a partir de ahí ir profundizando en su temática a medida que el niño va madurando. De hecho, nuestra Tercera lo descubrió con 2 añitos y le encantó desde el primer momento y a su manera entiende lo que se explica.

 

Te dejo el enlace para que puedas comprar El Monstruo de Colores, de Anna Llenas en Amazon.es:

El juego de mesa de El Monstruo de Colores

Recientemente ha salido al mercado también un juego de mesa para peques, publicado por Devir, con una cuidada edición, con troquelados de cartón duro de los botes de emociones, y figuras de madera.

En el juego, una vez más, tendremos que ir descubriendo y colocando las emociones en su sitio, moviéndonos por turnos con un dado por un tablero de colores. Un juego colaborativo para peques de 3 a 6 años.

El monstruo de colores juego de mesa

Cuenta con la peculiaridad de que cada vez que caigamos en un color tenemos que dar un ejemplo de una situación que nos hace sentir esa emoción, inventada o real. Una parte totalmente optativa pero que ayuda a los peques a expresar, escuchar y explorar las emociones.