Título: Mi vida de abeja
Publicación: Febrero 2019
Autor: Kirsten Hall e Isabelle Arsenault
Editorial: Libros del Zorro Rojo
Formato: Tapa blanda, 40 páginas
ISBN: 978-8494884894
Mi vida de abeja, de Kirsten Hall e Isabelle Arsenault
Mi vida de abeja, de Kirsten Hall e Isabelle Arsenault es una preciosa lectura que pone en valor a esos seres tan diminutos, tan temidos muchas veces, pero tan importantes para nuestro medio ambiente: las abejas.
El libro se dirige directamente al lector: Un prado. Un árbol. Trepa a sus ramas y observa… A tu alrededor, hasta donde alcanza la vista, crecen libres y silvestres LAS FLORES. De pronto… ¡zzzum! ¿Qué será? ¿No lo oyes? Está ahí. A tu lado, se acerca, agita sus alas y zumba…
¡UNA ABEJA!
El libro derrocha admiración por estos insectos:
Cuatro alas diminutas,
vibran, cantan,
aletean, aplauden.
La abeja vuela atareada.
Las abejas buscan, trasera, visitan las mejores flores y utilizan todo ese néctar.
Página a página descubrimos qué hacen las abejas con sus saquitos de polen, cómo construyen sus colmenas y las llenan de miel.
También cómo se comunican, cómo danzan, cómo trabajan incansablemente para fabricar la miel y el refugio que les ayudará a pasar juntitas el invierno.
En la parte final del libro encontramos un escrito en el que Kirsten Hall, su autora, se dirige directamente al lector para explicarle que las abejas son criaturas hermosas, que se parecen mucho a nosotros, por ejemplo, porque viven en familias y hogares, trabajan duro y cada una tiene una responsabilidad hacia el resto del grupo. Sin ellas nuestro planeta tendría un serio problema ya que gracias a que vuelan de flor en flor se propaga el plan y, así, se forman las semillas, que dan lugar a nuevas plantas, que son nuestro alimento, nuestra ropa y nuestra vida.
Ella considera que las abejas son uno de los seres vivos más maravillosos de nuestro mundo y, como están en peligro, quiere que todos seamos conscientes de que su trabajo es admirable, de que juegan un papel fundamental para el ser humano y que, en realidad, son pacíficas si las respetamos.
Mi vida de abeja es capaz de transmitir la fascinación de su autora. A través de un texto muy ameno podemos conocerlas mucho mejor y comprender cuál es su sitio en el mundo. La lectura resulta incluso poética, mezclando onomatopeyas y enumeraciones sencillas, que de alguna forma plasman la metódica y alegre tarea de las abejas.
Nos encanta el trabajo que ha realizado Isabelle Arsenault, la ilustradora de este libro. Nos parece un trabajo de un colorido espectacular, que combina toda la gama de amarillos con otros colores típicos de los campos por los que vuelan las abejas. En este álbum ilustrado sus dibujos juegan un papel fundamental. Las ilustraciones bailan con las palabras, mezclándose con las onomatopeyas y las enumeraciones. Son un lienzo perfecto y todo un deleite en cada página.
Comentábamos en casa que la ilustradora ha conseguido que las abejas nos parezcan realmente cuquis. Sus dibujos no las presentan como seres agresivos o peligrosos sino como bichitos sonrientes que hacen su trabajo con alegría y esmero. Es algo a destacar porque siempre nos han dado bastante miedo, y los mayores tienen cierto trauma porque al Mediano le picó una abeja en la piscina cuando tenía dos años. Esta lectura les ha permitido poner en valor a estos insectos y verlos con otros ojos.
Mención especial a la portada y contraportada del libro, verdaderamente bonitas y con algunas zonas, como las hojas y la tipografía, en relieve.
En definitiva, nos ha gustado muchísimo Mi vida de abeja, recién publicado en febrero de 2019 por Libros del Zorro Rojo. Un libro con una temática súper interesante, divertido, emocionante y bellísimamente ilustrado.
Os dejo el enlace para comprar Mi vida de abeja en Amazon.es: